Les
sugiero una curiosa experiencia…
Tecleen
en su buscador “la revolución de los recursos humanos”…
Efectivamente,
la pantalla nos ofrece unos 3.000.000 de resultados posibles y una buena parte
de ellos relacionan esta revolución con un concepto: 2.0
Por
supuesto, no voy a poner en duda el carácter revolucionario de la red y, menos
aún, sus consecuencias en las relaciones entre los humanos de una empresa.
Pero, sinceramente, el resultado del experimento, más allá de dejarme perplejo,
amenaza con sumirme en un profundo desasosiego.
¿En
esto se queda la revolución?
Hace meses, formulaba una pregunta en este
blog: ¿para que se contrata a alguien?
“…la respuesta apenas ha variado desde los tiempos de Smith y Ricardo y hasta formularse la pregunta parece ser un insulto a la inteligencia. La empresa contrata a una persona para trabajar. Adórnese como se quiera que, al final, dos y dos son cuatro. Refinando la respuesta, podríamos decir que se busca la máxima eficiencia en la ejecución de tareas, el respeto a las normas y la adhesión a los principios, la misión y los valores, buscando el máximo de fidelidad en términos de producción de valor y baja generación de conflictos y problemas añadidos. A cambio, la empresa, ese ente incorpóreo pero cuya existencia nadie pone en duda, promete cuidar de la persona, no sólo en lo que a prevención y seguridad se refiere, sino también tratando de conciliar lo laboral y privado, ayudando a un desarrollo profesional pleno, por supuesto sin llegar a explicitar demasiado que supone esto y sin dudarlo, pagando religiosamente el salario establecido.”
A
la vista de los hechos, la cuestión continua siendo la misma: ¿en esto se queda
la revolución?
Pido
perdón y comprensión de antemano a los profesionales especializados en el
desarrollo de la tecnología 2.0 en los Recursos Humanos así como mi adhesión incondicional a la misma.
Pero, ya saben, siempre hay un pero. ¿No estamos vendiendo la burra antes de
tener heno?
Personalmente,
creo y defiendo la necesidad de otras revoluciones anteriores…
EL
CONOCIMIENTO
La
2.0 puede llegar a ser el vehículo más potente con el jamás hayamos contado a
la hora de potenciar los flujos de conocimiento en las organizaciones. Pero
antes de que esto ocurra…
¿Tiene
clara la organización la sutil, pero definitiva frontera que separa los datos y
la información del conocimiento?
¿Se
acepta la validez universal del conocimiento en la empresa o existe
conocimiento de primera y experiencia práctica, una forma elegante de calificar
el conocimiento de segunda?
¿Es
reconocido el valor estratégico del conocimiento práctico como motor de
desarrollo y transformación del conocimiento formal de la organización?
EL
TALENTO
La
2.0 puede llegar a ser la herramienta más eficaz y potente que hayamos conocido
para identificar el talento en la empresa, promoverlo, potenciarlo y
conservarlo. Pero antes de que esto ocurra…
¿A
qué le llama “talento” una empresa?
¿El
desarrollo del talento es un deber o más bien un derecho que acaba conduciendo
al bien común corporativo?
¿Se
reconoce el talento como universal en la empresa o se diferencia de lo que
educadamente llamamos “empleados habilidosos”?
¿Se
orienta el talento a la resolución de problemas y desarrollo de oportunidades o
se malgasta en conseguir la máxima eficiencia en las rutinas?
EL
EQUIPO
La
2.0 puede llegar a ser el entorno perfecto para el desarrollo de equipos que
jamás hayamos conocido. Pero antes de que esto ocurra…
¿Promueve
la empresa equipos constituidos por personas, no sólo de distintas áreas, sino
también de distintos estratos profesionales?
¿Cultiva
la empresa el desarrollo del talento emocional necesario para poder trabajar en
equipo: interflujo, empatía, desinhibición, tolerancia, cooperación,
aplazamiento del juicio de valor…?
EL
CAMBIO
La
2.0 puede llegar a ser un potenciador de las estrategias de cambio como nunca
antes habíamos conocido. Pero antes de que esto ocurra…
¿Sabe
diferenciar la empresa entre cambio y desarrollo?
¿Llega
la empresa más allá de las políticas de sugerencias o buzones de ideas a la hora de democratizar el derecho a
participar en la gestión del cambio?
¿Existe
un liderazgo real de los RRHH a la hora de establecer las estrategias de
desarrollo de una gestión del cambio
integral?
¿Existe
una metodología estandarizada y habilitada para el trabajo en red que permita
optimizar las oportunidades de cambio?
Son
demasiados interrogantes para que podamos llegar a afirmar que la 2.0 es la
auténtica revolución del papel de los humanos en la empresa. De hecho, si no
conseguimos despejar muchos de ellos, es más que probable el fiasco. Y
sinceramente, no sería justo para algo que encierra en sí mismo una innovación radical
en la forma de entender nuestras relaciones en el marco de las organizaciones.
¿La
2.0 es un fin o un medio?
Quizás
esta sería la pregunta final y somos muchos los que creemos que nunca debiera
convertirse en un fin, pero puede ser un medio en un doble sentido. Medio
instrumental que ya hemos señalado, pero sobre todo, medio para conseguir
forzar esa serie de revoluciones anteriores que, tarde o temprano, habrán de
llegar a una empresa que se contenta con vestir los santos sin darse cuenta que
son cosa del pasado.
8 comentarios:
A veces pienso que cuando la gente comienza a hablar de estas cosas sin haber siquiera comenzado por lo más básico, es que está huyendo hacia adelante.
"A ver si con esta nueva pócima hacemos algo que merezca la pena", parece que están diciendo.
Pues no. De nuevo fiasco.
Un abrazo.
Desde luego que es un medio y no un fin , lo que ocurre es que, como bien apuntas, no tenemos muy claro lo más básico.
un abrazo
En mi empresa, tal y como se enfoca, el 2.0 es un ladrillo que alguien, normalmente el político de turno, lanza hacia arriba y a los demás(usuarios y trabajadores) nos cae en la cabeza. No exagero nada.Tu lo sabes Jose Luis.
Un abrazo
Que buena entrada. Esto es poner bien los puntos sobre las ies. Nada debe ser un fin salvo la felicidad y el bienestar de las personas. Lo demás sea 2.0; leyes, empresas, política, enseñanza, espectáculos, me da igual, deben "Servir" ser un medio para conseguir este fin.
Bss y buen finde
Javi
La fiebfre de la "actualización continua" ha llegado también al pensamiento...
Cuidate
Siempre un medio, pero el negocio lo ha convertido en un fin...
Cuidate Fernando
Hola Lidia
Ya, ya lo se, más que un ladrillo, igual es una losa...
Besos
Hola Katy
Gracias, cuidate
Publicar un comentario