Si
cada persona es un mundo, qué podríamos decir de una organización que no sólo
reúne a un buen número de ellos sino que además les pide lo mejor de sí mismas
y de su capacidad para relacionarse con otros, colaborar, cooperar,
intercambiar y, en definitiva, convivir.
Dicho
esto, resulta difícil aconsejar, recomendar o presentar condiciones para
considerarse esto o lo otro. Lo que resulta bueno para una empresa de veinte
trabajadores, no resulta en una de tres mil. Aquello que puede ser idóneo para
una empresa del sector logístico con cinco trabajadores, resulta erróneo para
una empresa con las mismas personas, pero del sector pecuario. Si cada persona
es un mundo, cada empresa lo son tantos como personas reúna.
En
cualquier caso, no resulta imposible establecer una serie de condiciones
mínimas o indicadores, si lo prefieren que permitan confirmar si una empresa
está avanzando de forma adecuada en lo que a la gestión de las personas se
refiere.
1.
PROACTIVIDAD
Las
personas están preparadas para aprovechar todas aquellas oportunidades que
brinde el entorno con el que la empresa interactúa.
2.
PREACTIVIDAD
Las
personas están preparadas para detectar todos aquellos problemas que surjan
cuando aún pueden convertirse en oportunidades.
3.
LIDERAZGO COMPARTIDO
La
empresa fomenta espacios de autonomía y responsabilidad compartida que
posibilitan la cogeneración de valor.
4.
REDES DE CONOCIMIENTO
Las
personas utilizan con normalidad las herramientas 2.0 como estrategia para
potenciar los flujos de conocimiento, interflujos creativos y todas aquellas
situaciones que deriven en generación de valor sostenido.
5.
METODOLOGÍA CORPORATIVA
La
organización cuenta con una metodología corporativa estandarizada para el
trabajo de equipos multidisciplinares en situaciones de gestión del cambio.
6.
DESEMPEÑO y RECONOCIMIENTO
La
organización potencia las estrategias encaminadas a reforzar el trinomio
salarios- desempeño – productividad.
7.
FORMACIÓN INTEGRAL
La
organización despliega estrategias de formación que permitan no sólo una mejora
de la capacitación especifica sino también fundamentalmente un cuerpo de
habilidades corporativas reconocidas que permitan hablar del “talento de la
organización”.
8.
COMUNICACIÓN, COMUNICACIÓN, COMUNICACIÓN
La
organización valora la comunicación como una de las estrategias básicas para
conseguir la cohesión e identificación de las personas con un proyecto común y
compartido, esforzándose por alinear lo que se dice con lo que se hace.
9.
SELECCIÓN INTELIGENTE
La
organización avanza en los procesos de selección directa, valorando la
potencialidad de las personas para integrarse en el “talento de la
organización” como agentes activos además de las acreditaciones externas que
presenten.
10. PERSONAS
La
organización demuestra más allá de los aspectos estrictamente declarativos que
las personas son su principal valor y su estrategia para la generación de valor
de forma sostenida.
2 comentarios:
¿Condiciones mínimas?
Dios mío, como lean este artículo algunos directivos que conozco, van a salir corriendo :)
Un abrazo.
Hola Javi
Bueno, esto es como los mandamientos, ya sabes...
Un abrazo
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