“A mí los pobres no me dan demasiada pena con esto de la crisis. Al fin y al cabo, ya están acostumbrados. En cambio, las personas con una posición que ahora ven como pueden ser embargadas algunas de sus propiedades, esos sí lo están pasando muy mal”. Esta es la reflexión que ayer noche tuve oportunidad de escuchar de boca de una “señora” adinerada en un programa de reportajes de TVE1, mientras se probaba un traje de 3000 euros en una tienda de la llamada “milla de oro” de Madrid.
Sin comentarios no porque los merece. En primer lugar la cadena pública por su mal gusto al emitir un “reportaje de actualidad” en torno al lujo, definido por esta señora como “aquello que no necesitas, pero que te puedes permitir”. El reportaje, titulado “Los ricos también lloran”, auguraba una visión de las posibles dificultades de la clase adinerada de este país como consecuencia de la crisis. Sin embargo, finalmente, el programa se centro de forma casi exclusiva en mostrarnos casas, coches, joyas, fiestas y otros caprichos de los llamados “vip” de este país. Curiosamente, no sabría decir si de forma deliberada, el reportaje mezclaba hábilmente las intervenciones de los “ex – nuevos ricos” y los “ricos de toda la vida”. En otras palabras, el mal gusto reventado frente a la exquisitez insoportable; el exceso hortera frente a la costumbre interiorizada por educación temprana; el compadreo delatador frente a la distancia aséptica;la vulgaridad marbelli frente a la discrección de Sotogrande. Pero, más allá de esta curiosa estructura, el reportaje no fue otra cosa que un despropósito en estos tiempos que corren.
Sin embargo, todo ello me ha sugerido un asunto de fondo que siempre me ha atraído: ¿por qué los pobres son tan pobres y los ricos tan ricos?
Este fulano es imbécil se dirán ustedes. Quizás, no puedo asegurarles lo contrario. Pero, no me acaba de convencer la afirmación de Marx: “Dios ama a los pobres, por eso ha creado tantos”. Tampoco me seduce demasiado la teoría de Beecher que justificaría la riqueza a partir de un proceso de selección natural. Ya se sabe que cuando empezamos con selecciones naturales, acabamos en los hornos crematorios.
Sea como sea, el tema me atrae morbosamente. Por ello, mis próximos post estarán dedicados a sucesivas entregas sobre el problema. Ya están avisados por si no comparten esa malsana curiosidad.
Buenos días y buena suerte
5 comentarios:
Efectivamente. Yo también vi el reportaje y me parecio bochornoso, empleando un calificativo suave. Los unos - nuevos ricos - por horteras y los otros - los de toda la vida - por aburridos y fuera de lugar.
El problema de este pais es que la gran mayoría de la población ha vivido como ricos en los últimos años, ufanandose de "lo bien que se vive en España", cuando no eran tales.
A mi también me interesa el tema, así que espero esos post.
Un saludo
Glory
Yo también tuve oportunidad de ver el programa y a la señora en cuestión que, por cierto, conozco de mi juventud, antes de su emigración desde el Norte por aquello de...
Glory, guapa, además de aburrida es insoportablemente "vacia" y tremendamente mayor pese a ese aire de "eterna juventud".
En fin, sinceramente vuestra.
Anonima, por supuesto
Pues leía el otro día que el concepto de lujo cambiaría. Que esa gente que compra diamantes sin importarle que gente a unos kilómetros más allá muera por dar lujo a unos pocos se estaba terminando. Que cada vez las compras se volverán más responsables. Y que el mercado va a ser tal caos que lo que se convertirá en lujo es comprar productos coherentes con tu manera de pensar. ... Claro que para esa señora quizá siga siendo muy coherente gastarse 3.000 euros en un traje... en fin.. un tema que da mucho de sí.
Ahh, la pregunta del millón: "¡¿Por qué una brecha social tan astronómica?!", o mejor dicho, ¿por qué todavía los gobiernos no se dignan a disminuirla? Si se trata de incrementar el consumo para reactivar la economía (yo diría más bien “resucitar” un modelo que ya ha mostrado sus obvias grietas), ¿no es acaso bien sabido como la distribución coherente de la riqueza hace que los sectores bajos, que suelen ser los más poderosos, consuman, una vez que tienen esa posibilidad?
Honestamente, no he leído todo El Capital, pero me da la sensación de que la frase de Marx puede llegar a ser un tanto irónica: los pobres no los crea Dios, los crea la concentración de los bienes de producción en esas pocas manos regordetas, llenas de anillos relucientes; en tanto a los demás, les queda vender su “fuerza de trabajo” y a algunos, ni siquiera eso. En cuento a la señora tal vez podamos decir: “Dios los cría y España los junta”, pero idiotas, realmente, hay en todos lados…
Muy buen post, un saludo.
Hola a todos
Este reportaje no es más que un reflejo de cómo ha crecido España en estos últimos años; un país que, en una década, ha logrado el potencial económico que a otros estados le ha costado 30 años, pues da lugar a este tipo de realidades sociales. En cuanto a lo que decís en alguno de los comentarios respecto a lo del consumo responsable, estoy convencido de que se trata de una tendencia que cogerá cada vez más fuerza. En esta misma línea, resulta interesante el nuevo libro de Daniel Goleman Inteligencia Ecológica. En él teoriza sobre el hecho de que el consumo responsable por parte de la gente tendrá efectos beneficiosos sobre el medio ambiente.
Enhorabuena por el post y espero los siguientes post sobre este tema
Saludos
Claudio
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